Si se te acaba de ocurrir una idea de negocio innovadora que revolucionaría un campo o una industria, pero no tienes los medios para realizarla tú mismo, es posible que te preguntes si podrías venderla. La respuesta corta es sí, definitivamente puedes.
Sin embargo, el proceso no es tan simple como visitar un edificio comercial, compartir su gran idea y salir con un cheque considerable. En esta guía, aprenderás a proteger tu idea, a presentarla como un profesional y a recibir un pago.
¿Me pueden pagar por mi idea?
Sí, puedes, pero hay varias condiciones. Las empresas solo están interesadas en ideas innovadoras que sean específicas de su industria y resuelvan un determinado problema al que se enfrentan ellas o sus clientes.
Por ejemplo, las empresas de tecnología podrían estar interesadas en soluciones de software innovadoras, la industria minorista puede considerar la idea del diseño de nuevos productos, y la lista continúa. Lo más importante que hay que sacar de esto es pensar en características o soluciones estrechas y específicas.
En lo que respecta a la charla sobre dinero, hay varias formas en que se puede cobrar por tu idea:
- Pago único
Se le pagará por su idea de negocio y abolirá todos los derechos sobre ella.
- Acuerdos de licencia
Recibirás regalías basadas en la venta de ganancias, lo que convierte tu idea en ingresos pasivos.
- Empresas conjuntas
Se asociará con la empresa para llevar la idea al mercado y compartir las ganancias.
Dependiendo de lo que usted y la empresa decidan, puede obtener un pago único sólido o convertir su idea en ingresos pasivos o un trabajo secundario.
¿Puedo vender mi idea sin una patente?
La respuesta corta es sí, puedes vender o licenciar tus ideas creativas sin una patente, pero existen algunos riesgos. El principal se refiere a la propiedad intelectual.
En términos generales, una patente está destinada a proteger su propiedad intelectual contra el robo, la copia o el uso sin su permiso durante un cierto período de tiempo. Si bien puede parecer un plan obvio, tiene una gran desventaja: obtener una patente puede ser bastante costoso y llevar mucho tiempo.
Lo bueno es que, como se mencionó anteriormente, no siempre necesitas una patente para vender tu idea. Las empresas suelen estar abiertas a ideas de productos no patentados, siempre que sean buenas y tengan el potencial de tener éxito.
Sin embargo, esto no significa que no puedas proteger tu propiedad intelectual de otras maneras. Aquí hay un par de métodos que puedes usar para asegurarte de que tu idea sea segura:
- Acuerdo de confidencialidad (NDA)
Un contrato de confidencialidad garantizará que tu idea no sea robada.
- Documentación completa
Guarde el proceso de desarrollo y las explicaciones detalladas de cómo funciona para convencer a las personas de que las ideas del producto son realmente suyas.
Si cree que su idea es particularmente compleja o innovadora, puede valer la pena dedicar tiempo y dinero a consultar con un abogado de patentes para ver si solicitar una patente es una solución lógica.
Cómo presentar una idea sin que te la roben
La mayoría de los inventores tienen un miedo bastante racional de que su idea sea robada una vez que la presenten a una empresa. Y es poco probable que el inventor individual quiera llevar las cosas a los tribunales con una empresa que tiene muchos más recursos.
Sin embargo, como se mencionó anteriormente, hay formas de protegerse:
- Acuerdos de confidencialidad
Un acuerdo de confidencialidad obligará legalmente a la empresa a mantener la confidencialidad de su idea y evitar que la utilicen sin su permiso. Antes de hacer cualquier negocio con una empresa, pregúnteles si están dispuestos a firmar un acuerdo de confidencialidad.
- Política de la empresa de investigación
Algunas empresas pueden tener políticas específicas sobre ideas externas. Asegúrate de leer la letra pequeña y entender en qué te puedes estar metiendo, antes de renunciar a los derechos de tu idea sin siquiera saberlo.
- Documenta tu idea
Mantenga una documentación completa de su idea con los procesos, diseños, prototipos y otras cosas que pueden ayudarlo a demostrar la propiedad en caso de disputas legales.
¿Cuánto vale mi idea?
El valor de tu idea depende de tres factores muy importantes:
- Demanda de la industria
Si tu idea resuelve un problema apremiante o presenta un enfoque innovador que mejoraría algo drásticamente, inherentemente valdrá más.
- Viabilidad
Si tienes una gran idea pero es casi imposible de implementar, es probable que nadie la quiera. Piensa siempre en lo fácil que sería hacer realidad la idea. Afectará el precio.
- Potencial de mercado
Si realizó su investigación y está seguro de que su idea tendrá una gran base de clientes, seguramente valdrá la pena su tiempo. Especialmente si es fácil de implementar.
Si desea aclarar el precio real o un rango de precios, como mínimo, debe buscar un abogado de patentes o un experto en valoración. Estos especialistas tendrán en cuenta las tendencias económicas actuales, las tendencias de la industria, el tamaño del mercado y la viabilidad, entre otras cosas.
Las empresas pueden tratar de manipularte para que pienses que tu idea no es tan buena como crees, con el único propósito de reducir el precio. Saber cuánto vale tu idea consultando a profesionales te hará sentir más seguro y podrás aportar argumentos sólidos de por qué el precio debería ser más alto.
Cómo presentar tu idea a las empresas
Lo más importante a tener en cuenta es la profesionalidad y la estructura. Tu idea debe ser comunicada de una manera que sea excepcionalmente fácil de entender. Además, debe mostrar claramente qué problema resuelve.
Estos son algunos consejos para un pitch exitoso:
- Saber qué problema resuelve la idea
Las empresas suelen buscar ideas creativas que resuelvan problemas específicos. Investigue la industria y la empresa, observe sus ofertas y sugiera alguna característica nueva o una actualización que cubra un nuevo segmento del mercado o agregue funcionalidad adicional.
- Presenta tu idea con claridad
Usa elementos visuales, gráficos, diagramas, prototipos o cualquier otra cosa que creas relevante. Es esencial que la empresa entienda tu idea de forma clara como el día.
- Destacar los beneficios
En lugar de centrarse únicamente en los detalles técnicos, hable de los resultados finales. Esto puede hacer que se involucren emocionalmente y luego pidan ellos mismos los detalles técnicos.
Conclusión
Como puedes ver, es totalmente posible que te paguen por tus ideas innovadoras, tanto con una patente como sin ella. La clave es entender a quién le estás vendiendo y qué problema resuelve tu idea. No olvide tomar precauciones y leer la letra pequeña de las políticas de la empresa, preparar acuerdos de confidencialidad y crear una documentación completa de su idea. Si, después de leer este artículo, sientes que vender ideas no es lo tuyo, asegúrate de consultar algunas ideas de ingresos pasivos para inspirarte, o descubre cómo puedes ganar dinero jugando.